Brownlow North (1810-1875) nació en Londres, nieto de un antiguo Obispo de Winchester. Se educó en el famoso colegio de Eton. Después de vivir un tiempo en Corfu con su tío, y en Portugal durante un breve periodo de tiempo como soldado, finalmente se estableció en Escocia. Allí vivió una vida de placeres, siendo amante de la caza y las apuestas.
Se convirtió como consecuencia de un comentario que le hizo en 1839 la duquesa de Gordon, una piadosa aristócrata escocesa, una semilla que tardó quince años en dar fruto. En 1954 comenzó una actividad vigorosa como predicador laico, y se hizo evidente que tenía un llamado de Dios a proclamar el evangelio. Pronto se hizo muy popular como predicador en muchas iglesias de Escocia, y en 1859 fue reconocido oficialmente como evangelista por la denominación Free Church of Scotland. Ese mismo año, viajó a Irlanda y fue muy usado por Dios en el avivamiento que se extendió por la isla. En una ocasión predicó a nada menos que 12000 personas.
Después de veinte años de trabajo incansable, predicando en toda Gran Bretaña e Irlanda, Brownlow North murió en noviembre de 1875 y fue enterrado en el Cementerio Dean Churchyard de Edimburgo.