Arthur W. Pink nació en Nottingham, Inglaterra, el 1 de abril de 1886, y se convirtió cuando tenía poco más de veinte años. Sus padres eran cristianos pero él se había unido a una secta sub-cristiana en la que había alcanzado prominencia. Su conversión llegó al leer Proverbios 14:12, “hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte”.
Con el deseo de crecer en el conocimiento de la Biblia, Pink emigró a los Estados Unidos para estudiar en el Moody Bible Institute. Después de casarse en 1916, volvió al Reino Unido. De 1925 a 1928 sirvió en Australia, entre otras cosas, como pastor de dos congregaciones. Regresó a Inglaterra y después a los Estados Unidos al año siguiente. Finalmente, pastoreó iglesias en Colorado, California, Kentucky y Carolina del Sur. En 1934, Pink regresó a Inglaterra, y después de unos años, cambió el servicio por la escritura de libros. Pink murió en Stornoway, Escocia, en julio de 1952.
En 1922, mientras estuvo en Estados Unidos, comenzó una revista mensual titulada (en inglés) Estudios de las Escrituras. La leían cristianos de todo el mundo, aunque la tirada era bastante pequeña, unos mil ejemplares. Sin embargo, después de su muerte, su trabajo fue reimpreso por The Banner of Truth Trust y llegó a un número mucho mayor de lectores. Su biógrafo Iain Murray observa de Pink que “la amplia circulación de sus escritos tras su muerte le hizo uno de los autores evangélicos más influyentes de la segunda mitad del siglo XX”. Sus escritos fueron la chispa que inició un resurgir de la predicación expositiva y que atrajo a los corazones de sus lectores a una forma de vivir acorde a la Biblia.