Siempre preparados
He pasado el fin de semana en Cataluña. Es decir, muy lejos de mi dulce hogar. Un viaje de más de 1400 km. ida y vuelta y un largo rato sentado en el coche. Menos mal que iba acompañado de mis buenos amigos, Pepe y Fina, aunque solo fuese por tener el hombro lesionado y no poder conducir. La ocasión fue la celebración bianual del Forum Apologético organizado por la Alianza Evangélica Española y Grupos Bíblicos Universitarios.
Alister McGrath
El conferenciante principal era Alister McGrath, reconocido apologista y uno de los más leídos e influyentes escritores cristianos del mundo. Profesor en la Universidad de Oxford, conferenciante mundial y autor de unos 90 libros, en el año 2007 debatió con el conocidísimo ateo Richard Dawkins.
La lógica ilógica
Durante 3 plenarias y 2 seminarios McGrath definió la apologética, que no solo es para debates con inconversos sino para hablar con otros creyentes también; nos acercó al debate con los nuevos ateos, como Richard Dawkins, destacando que en vez de ser «a-teos» son más bien «anti-teos» y que no todo se puede «probar» con la razón y la lógica; y examinó el problema de las dudas para el cristiano y por qué tener dudas, no es un problema tan grande como parece.
Apologética
La apologética es un tema fascinante y si por un lado era grato ver a más de 200 personas reunidas allí, a la vez era triste ver tan sólo 200 personas que querían cumplir con las palabras de Pedro, personas que querían estar «siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros». Al fin y a cabo eso es la apologética, defender de forma razonada la fe cristiana.
Dificultades editoriales
Aunque estuve allí par escuchar, a la vez llevaba una selección de libros de Editorial Peregrino. Al final éramos dos editoriales con mesa allí, nosotros y Andamio (brazo editorial de GBU). Comentando con el director de Andamio, Francisco Mira, compartimos nuestras penas a la hora de intentar vender libros en un pais como España, sacudido por una crisis económica que resulta en que los creyentes simplemente no compran tanto como antes. Para algunas editoriales la única solución ha sido aliarse con otras extranjeras, dejando solo a Peregrino y Andamio como independientes dentro del mercado español. Además de ser una observación que tiene implicaciones a la hora de las ventas, es también un comentario sobre una iglesia que lee aun menos que antes, y la pregunta es ¿cómo se está preparando la iglesia para presentar la defensa de su fe? Nos hemos alejado bastante de la actitud de Erasmo de Rotterdam, que queda reflejada en su famosa cita: «Cuando tengo un poco de dinero, me compro libros. Si sobra algo, me compro ropa y comida».
El Apostol Pablo
A la vuelta de la conferencia pasamos por Tarragona, y ni cortos no perezosos decidimos buscar la estatua del Apóstol Pablo celebrando su supuesta llegada a España en el año 63 dC. Habiéndonos fallado los aparatos tecnológicos, emprendimos la búsqueda a la antigua, preguntando. El primer problema era evitar a los turistas y para preguntar a los residentes. Tres o cuatro intentos con los «nativos» desde la ventanilla del coche tampoco dieron resultado, simplemente la gente se quedaba en blanco y encogían los hombros. Llegando al casco antiguo abandonamos el coche y volvimos a preguntar. La primera mujer no sabía y nos declaró que no tenía ningún interés en el Apóstol Pablo (¿sería prima lejana de Richard Dawkins?). Entramos en una tienda de recuerdos, suponiendo que los que viven de la historia de la ciudad sabrían algo de la visita de Pablo a su costa. Pero nada de nada. Al final, volvimos a intentar con el GPS y dio resultado. Terminamos en una pequeña plaza a 300 metros de la tienda donde no sabían «nada de nada», y allí delante del arzobispado de Tarragona pudimos contemplar la estatua que recuerda la hipotética llegada de Pablo a España. Pudimos leer una de las inscripciones que recordaba que el Apóstol era «el hombre que ha ejercido la máxima influencia en la historia universal», y por otro costado ver que los que rezaban con devoción un padrenuestro frente a la estatua podrían disfrutar de 300 días de indulgencia.
El hombre mas influyente
¡Tanta ignorancia! El hombre más influyente de toda la historia según la inscripción (y creo que es una descripción correcta); el hombre que si al final cumplió con su deseo de llegar a España, lo hizo para predicar el evangelio de las Buenas Noticias de la salvación única y exclusivamente en Cristo Jesús. Y en un pais que se ha considerado cristiano durante los últimos 500 años, nadie sabía donde estaba su estatua.
Presentar defensa
Más que nunca necesitamos evangelistas en España. Más que nunca hacen falta apologistas. Más que nunca es imprescindible ver en nuestras iglesias creyentes, sí, todos los creyentes, no solo un grupo «selecto» reducido, que están «siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que les demande razón de la esperanza que hay en ellos».
Mateo Hill director@editorialperegrino.com